A menudo se critica la decisión de tener un hijo más tarde en la vida, considerándola peligrosa tanto para la madre como para el niño, ya que el riesgo de complicaciones en el embarazo aumenta con la edad. Aunque no se puede negar el hecho de que la fertilidad de la mujer disminuye con la edad, cada vez más mujeres optan por posponer el embarazo congelación de huevo. Tener un hijo en una etapa posterior de la vida tiene muchos beneficios, muchos de los cuales pueden superar los riesgos.
Estabilidad financiera y profesional
En promedio, un niño cuesta alrededor de 14,000 dólares al año. Los padres mayores tienen más probabilidades de tener más dinero y ser más estables financieramente, con empleos mejor remunerados. Estas parejas suelen vivir en un hogar con dos ingresos y han tenido tiempo para avanzar en su carrera.
Estabilidad de la relación
La estabilidad de la relación se ve afectada tanto por la edad de la pareja como por la edad de la relación. Las parejas que llevan mucho tiempo juntas han tenido la oportunidad de consolidarse como pareja. Esto es importante porque un bebé agregará una nueva dinámica a la relación. Cuanto más fuerte sea la relación entre los padres, más probable será que la relación sobreviva a todos los cambios que conlleva tener un bebé.
Madurez emocional
La oportunidad de crecimiento emocional está presente a lo largo de toda la vida de un individuo. Es probable que un padre de 35 años tenga mucha más madurez que uno de 25 años. Los niños, desde temprana edad, no tienen mucho control sobre sus emociones. Es trabajo de los padres enseñar al niño a autorregularse. Esto se enseña a través del ejemplo, y los padres mayores a menudo se encuentran en un mejor lugar en sus vidas para mostrar esta madurez.
